¿Dónde colocar los productos en tu tienda para vender más?

A lo largo de los años hemos aprendido la importancia que tiene la colocación de los productos dentro de las tiendas. Nada se deja al azar, y cada vez más aparecen estudios de merchandising que analizan esta serie de cuestiones para conseguir incrementar las ventas. Dónde colocar los productos debe ser una de las decisiones fundamentales de un buen empresario.

Para muchos autores merchandising significa “aplicar el sentido común” a la ubicación de los productos en un espacio físico. Estos mismos autores presentan diferentes teorías que ayudan a aumentar las ventas a través de la colocación de los productos dentro de las tiendas o empresas. Aquí te explicamos las teorías más utilizadas en la actualidad.

¿Dónde colocar los productos para vender más?

Así, lo más recurrente es colocar los bienes de primera necesidad en el extremo opuesto de la entrada, para que los clientes tengan que recorrer toda la tienda y, en su recorrido vayan viendo otros productos que puedan crearles antojo o necesidad.

También es importante pensar en la altura a la que se pondrán los artículos, así, es frecuente que productos similares se coloquen a distintas alturas de los ojos. Otra opción muy utilizada es la de guiar a los clientes a través de colores en el suelo, que te llevan hacia productos en promoción.

Otros factores que afectan a la compra

Los olores, sonidos e incluso la temperatura son otros factores que pueden afectar al consumo. Así, por ejemplo, es mejor utilizar tonalidades cálidas a la hora de decorar nuestra tienda, ya que los clientes se sentirán mejor en ese tipo de ambientes o tener siempre una temperatura agradable en el local, ya que un exceso de frío o de calor hará que los futuros compradores no se sientan cómodos en nuestra tienda y que salgan rápido de ellas sin que puedan ver todos nuestros productos.

Pero a parte de todos estos trucos y consejos, te ofrecemos otros que te ayudarán a pensar mejor sobre la colocación de los productos en tu empresa. No obstante, nunca está demás hacer algún curso sobre nociones básicas de merchandising. A veces nuestros propios proveedores ofrecen cursos gratuitos sobre esta materia.

Cómo colocar productos en una tienda

La arquitectura interior de la tienda debe resolver principalmente varias preguntas como dónde colocar las diferentes categorías de productos sobre la superficie comercial existente. Para ello, debemos dividir nuestra tienda en zonas frías y calientes.

Zonas calientes

La zona caliente es una extensión que se localiza dentro de la circulación “natural”, es decir, es el área por donde deambulan los clientes, independientemente del artículo que busquen. Por lo tanto, deben ser ocupadas por productos con menos frecuencia de compra o por productos de baja rotación. Aquí se ubicaran aquellos productos que queramos impulsar o potenciar su venta.

Zona fría

En la zona fría estarían aquellos espacios situados en vértices poligonales de la tienda y, teóricamente, los espacios más inaccesibles y los menos visibles del establecimiento. Aquí situaríamos los bienes de primera necesidad, los productos más frecuentes o de mayor rotación. Otro criterio para ayudarnos a reflexionar sobre la colocación de nuestros productos en la tienda reside en su tipo de compra. Así, hay cuatro tipos de compra:

Compra necesaria prevista

Son productos necesarios y que el cliente ha previsto adquirir. Su ubicación debe ser en la zona fría, con el fin de “dirigir” a los clientes hacia puntos concretos de la tienda. • Compra necesaria imprevista: son productos necesarios, pero el cliente no tiene previsto comprarlos; por este motivo deben ser colocados también en las zonas frías, cercanas a los anteriores. Ejemplos de éstos podrían ser los accesorios.

Compra deseada imprevista

Son productos deseados que el cliente no ha previsto comprar, por lo que su exposición debe localizarse necesariamente en las zonas calientes.

Compra deseada prevista

Son los productos en los que el desencadenante de la compra será el valor añadido pre y post-venta, consistente en la información, el asesoramiento, etc. Por tanto, deben estar situados en puntos cercanos al mostrador o en las zonas calientes naturales. Ejemplos de esto serían los productos de higiene y dermatológicos.

Evidentemente cada tienda es única y diferente, de ahí que sea difícil dar consejos generales sobre la ubicación de los productos. Esperamos que os sirva esta clasificación para que reflexionéis en la catalogación de vuestros productos y podáis así ubicarlos de la mejor forma posible para obtener el máximo de beneficio. Además, ¡no te olvides de la importancia de la decoración de tu escaparate!

¡Esperamos que ya tengas algunos productos colocados correctamente y no tengas que mover todos los estantes de la tienda!